lunes, 2 de enero de 2012

El vuelo de Easyjet

Otra tira de celo para asegurar la cola y ale, listo.

Tú, simpático azafato sodomita de voz aflautada, me has despertado para ofrecerme vuestros sandwiches recalentados.
Tú, dinámica asistente de vuelo con problemas de autoestima, me has despertado para anunciarme vuestra oferta en perfumes.
Tú, juvenil azafata de teñidas canas, me has despertado para recomendarme vuestra exquisita bollería industrial.
Tú, divertido piloto de pulso resacoso, me has despertado para contarme lo mucho que te gusta tu trabajo y la temperatura que hace en este momento fuera del avión, a diez mil metros de altura.

Sí, me habéis despertado muchas veces y de muchas formas, pero yo, que ya os conozco, esta vez estaba preparado.
Así, cuando en vuestro próximo vuelo, os preguntéis si el repugnante olor que inunda el avión es fruto de vuestra podredumbre moral, no hallaréis respuesta.
Y esa duda os acompañará hasta que alguien, algún día, descubra el salmonete que coloqué debajo de mi asiento.

3 comentarios:

  1. el hecho de que sea un salmonete y no un simple "pescado" le da el toque cómico definitivo!

    ResponderEliminar
  2. Me parto con esta entrada.
    Yo siempre intento comer garbanzos o alubias asturianas antes de montarme en un avión por si acaso hay batalla que librar.

    Sigue poniendo post que te alegran durante un rato, especialmente la vida dura como la mia y la otros 5 millones de parados de la herencia socialista...

    ResponderEliminar
  3. jaja muy ingenioso sí...
    Yo siento esto más bien con Ryanair...

    ResponderEliminar